ILUSTRÍSIMA, VENERABLE Y ANTIGUA HERMANDAD Y COFRADÍA DEL SANTÍSIMO SACRAMENTO,
SANTÍSIMO CRISTO DE LAS ALMAS, NUESTRA SEÑORA DE LA PAZ Y ÁNIMAS BENDITAS

IGLESIA PARROQUIAL DE SANTIAGO EL REAL Y DE REFUGIO

JEREZ DE LA FRONTERA


martes, 23 de febrero de 2010

Un Vía-Crucis que será recordado

Echando la vista atrás, pocos son los Vía-Crucis, con permiso de todos ellos, que se hayan celebrado con una solemnidad tan exquisita como el de anoche.
Y es que la Hermandad de las Tres Caídas ha sabido infundir a sus hermanos como hay que hacer las cosas, como hay que comportarse en la calle, como hacer que los cofrades puedan soñar despiertos y como ensalzar aún, más si cabe, un acto tan solemne y piadoso como es el ejercicio del Vía-Crucis.

La parihuela, la túnica del Señor, las cantoneras y la cruz, la seriedad del cortejo, el precioso itinerario (sobre todo el de vuelta), el silencio, el riguroso negro de los hermanos, el rezo de las estaciones, las hermandades participantes, los fieles y devotos, la Coral Catedralicia, la Escolanía de Niños Cantores, la Coral San Pedro Nolasco.... Todo fue absolutamente maravilloso.

Un momento para el recuerdo fue, a la altura de la calle Salvador, ya de regreso, cuando una mujer mayor ayudada por sus hijos se asomó a la casapuerta para ver pasar al Señor de Jerez. Pero el Señor no pasó de largo, sino que quiso pararse para mirar a los ojos a esa señora, completamente emocionada, y, además, quiso darle una de las flores que le acompañaron en su caminar por las calles de Jerez.

Y para colmo de bienes, la tan temida lluvia que ha estado castigando nuestra ciudad durante los últimos días no hizo acto de presencia durante toda la tarde-noche.